
En una demostración de resistencia y habilidad poco común, el controvertido personaje y exkickboxer Andrew Tate participó recientemente en una sesión de sparring masiva. Durante este entrenamiento, Tate se enfrentó sucesivamente a un total de 50 oponentes diferentes. Lo más notable fue la inclusión de una exestrella de la UFC entre los participantes, añadiendo un nivel extra de interés y desafío a la exigente sesión. Este tipo de entrenamiento, donde un luchador se mide contra múltiples compañeros en rápida sucesión, pone a prueba no solo la técnica sino también la condición física y mental al extremo.